En invierno, conserve su piscina en perfectas condiciones.
Por ahorro, por estética y por mantenimiento.
Con la llegada del frío es importante tomar una serie de medidas que permitan mantener el agua en perfecto estado durante el tiempo que no se use, y evitar que se ensucie o se evapore.
Al preparar una piscina para la hibernación es muy aconsejable utilizar cobertores que protejan la lámina de agua durante los meses de frío.
A fin de proteger la lámina de agua durante los meses de frío, son muchas las ventajas que proporciona el uso de este tipo de lona de poliéster recubierta con PVC, generalmente de doble cara.
- Crea un colchón de aire aislante entre el agua y la colcha y disminuye el riesgo de posibles heladas.
- Impide el paso de la luz y limita, así, la formación de algas.
- Evita la suciedad que normalmente cae en la piscina, como hojas, ramas, etc.
- Dispone de unos elementos de anclaje para tensar el cobertor alrededor de la piscina y protegerla mejor.
- Facilita las tareas de puesta a punto con el arranque de la nueva temporada de baño, alargando así varios años el uso de la misma agua.
- Dispone de desagüe para evacuar las aguas pluviales.
- Se fabrica a medida de cada piscina y se adapta a cualquier forma.
El uso de fundas para las piscinas, además de ser un elemento de seguridad, puede ayudar a reducir entre un 30 y un 50% el uso productos químicos y evitar que el agua se evapore de forma sustancial. La mejor época para poner las colchas de piscinas es a partir del momento en que se acaba la temporada de baño, es decir, desde el otoño hasta la primavera, que comienza de nuevo la temporada de baño.
Una ventaja destacada de los cobertores de piscinas es que nos permiten alargar la temporada de baño, ya que nos ayudan a mantener la temperatura durante mucho más tiempo, por lo que, aunque se produzca una bajada de las temperaturas, si durante la noche hacemos uso del cobertor de piscina, impediremos que se enfríe el agua y el baño aún será agradable durante más tiempo.